Hasta el momento, para conducir legalmente en Portugal, los brasileños tenían que esperar 90 días después de la autorización de residencia para pedir el cambio de la licencia por la portuguesa.
El derecho de conducir con la licencia de conducir del país de origen valía para ciudadanos de la Unión Europea y del Reino Unido que viven en Portugal. Ahora, ese grupo va a ser ampliado para los países de la Comunidad de los Países de Lengua Portuguesa (CPLP), en que Brasil es parte, y de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), grupo en que el gobierno brasileño quiere incluir el país.
La decisión aún va a ser publicada en el Diario de la República de Portugal.
Entre los países beneficiados están, además de Brasil, Angola, Cabo Verde, Guinea-Bissau, Guinea Ecuatorial, Mozambique, Santo Tomé y Príncipe y Timor-Leste, así como los ciudadanos de Australia, Canadá, Chile, Colombia, Corea del Sur, Costa Rica, Estados Unidos, Israel, Japón, México, Nueva Zelanda, Suiza y Turquía.
Los conductores pueden usar el documento emitido en el país de origen hasta el fin de la caducidad. Después, deben cambiar por la versión portuguesa.
Antes de la decisión, solo los ciudadanos de la Unión Europea, Reino Unido, Noruega, Islandia y Liechtenstein podían vivir y conducir en Portugal con el documento emitido en el país de origen.
En los tres meses, era posible conducir con el documento brasileño. Expirado ese plazo, los brasileños tenían hasta dos años para requerir el cambio por la licencia válida en Portugal, pero no tenían más autorización para conducir de acuerdo con la legislación local.
Para tener acceso al documento válido, era preciso pagar cerca de 30 euros y hacer una evaluación médica. Después de dos años, era necesario hacer la renovación de manera tradicional que obligaba un nuevo examen de conducir.
Brasilenos con permanencia en Portugal por hasta 185 días, como turistas, no tienen que lidiar con los cambios de documentación y pueden conducir normalmente.
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